Aunque nuestro producto en forma de crema para uso tópico presenta una textura y consistencia apropiadas para emplearse en la piel, contando además con un agradable olor. Para culminar proyecto tecnológico-industrial nos restan algunos pasos, los cuales estamos dispuestos a dar en la medida de nuestras posibilidades.
Comprobar la eficacia de la crema como fungicida. Para ello, debemos realizar ensayos clínicos con personas de nuestro entorno que presentan distintas afecciones en la piel. En este paso nos encontramos inmersos, debiendo presentar la solicitud de autorización para la realización de ensayos clínicos para productos naturales procesados para uso medicinal.
Recibir los permisos sanitarios. Posteriormente, a los ensayos, si estos son favorables, se podrían obtener los permisos pertinentes.
Obtención de la patente y registro de la marca. Nuestra intención es realizar cada uno de estos pasos durante el tercer trimestre. Y finalmente, realizar un estudio de rentabilidad económica para asegurarnos de la viabilidad del producto.
